Cuando el mundo del CrossFit mira hacia Wodapalooza, atletas de cada rincón del planeta se reúnen para medirse en fuerza, agilidad y resistencia. En esta edición reciente, brillaron dos nombres que nos llenan de orgullo: Álex Atienza y su hijo Eric.
Álex compitió en la categoría Máster +45 y obtuvo un meritorio 2.º puesto, demostrando que la edad es sólo un número cuando el talento y la dedicación están presentes. Por su parte, Eric firmó un brillante sexto puesto en la categoría Teens, demostrando que el futuro de este deporte tiene relevo asegurado.
Pero detrás de esos números hay una historia que merece contarse: horas de entrenamiento en box, sacrificios, motivaciones familiares y, también, pequeños detalles que acompañan a los atletas ahí donde compiten.
La familia como motor
Detrás de los nombres, hay una historia familiar. Álex y Eric no solo comparten genética y pasión por el deporte, sino también un vínculo que trasciende el box. El hecho de competir juntos en un evento de talla mundial es, en sí, un símbolo de comunión: metas compartidas, nervios compartidos, retos superados codo con codo.
En su caso, cada repetición, cada caída, cada levantamiento… todo tiene un significado más profundo: demostrar que juntos se puede llegar lejos. Y en esa simbiosis entre padre e hijo disfrutamos, nos emocionamos y nos inspiramos.
El valor del ejemplo
Álex Atienza lleva años demostrando que la constancia y el compromiso no entienden de edad. Su ejemplo se refleja ahora en Eric, que con apenas 15 años ya compite en escenarios internacionales mostrando madurez y ambición.
Durante los días de competición, padre e hijo vivieron momentos de tensión, satisfacción y orgullo compartido, esos que solo el deporte sabe regalar. Entre levantamientos, transiciones y aplausos, demostraron que la verdadera victoria está en disfrutar el camino juntos.
Y aunque lo anecdótico no resta mérito, nos llena de orgullo saber que ambos confiaron en calleras de Mr.WOD durante sus WODs —un pequeño detalle que nos conecta con su historia sin robarle protagonismo.
Una lección para toda la comunidad
Su actuación en Wodapalooza nos recuerda por qué amamos este deporte. Porque más allá de los números y los podios, lo importante es la mentalidad, el trabajo en equipo y la pasión por mejorar cada día.
Desde Mr.WOD, queremos felicitar a Álex y Eric por su extraordinario rendimiento y por representar los valores que definen a toda la comunidad: constancia, humildad y amor por el esfuerzo.
Cerramos con una idea sencilla
En el CrossFit, como en la vida, no hay atajos: solo compromiso, disciplina y ganas de superarse.
Álex y Eric Atienza lo demostraron en Wodapalooza. Nosotros solo tuvimos la suerte de acompañarlos, de alguna forma, en ese camino.
